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Mantener el ejército de Bangkok15: 04 15/03/2010, Simon Tisdall, comentario, comentario es libre, guardian.co.uk, protesta, Tailandia, noticias del mundo, Guardian Unlimited

Las élites de Tailandia no le guste, pero la gente apoya a Thaksin alineados partes. Llevar en el ejército no es la respuesta

No es difícil identificar al hombre en el centro de los trastornos más reciente de Tailandia política. Sectores influyentes de la sociedad tailandesa, generalmente identificados como las elites urbanas ricas, los militares y realistas, han estado tratando de deshacerse de Thaksin Shinawatra, desde que por primera vez el ministro llegó al poder en 2001. A pesar de que ahora vive en el exilio, desterrado de su sombra persigue a las calles de Bangkok.

Un frustrado complot para hacer estallar avión de Thaksin, dos meses después de su primera victoria electoral inició una década de confusión. Fue reelecto por otro deslizamiento de tierra en 2005, sólo para enfrentar los desafíos más judicial, planes de asesinato aparente, y, finalmente, el golpe militar que lo derrocó en 2006. Las manifestaciones que alcanzó un nuevo clímax en la capital, hoy en día tienen un foco central: una convocatoria de nuevas elecciones, que los partidos pro-Thaksin es casi seguro que ganar.

A pesar de un reciente fallo judicial que lo declaró culpable de corrupción y se apoderaron de cerca de £ 1bn de sus bienes, Thaksin sigue siendo el poder a tener en cuenta en la política tailandesa. "Hermanos y hermanas, no te rindas. No pelear por mí. Luchar por el país", dijo a sus seguidores en el fin de semana, hablando desde un lugar no revelado en el extranjero. "Yo soy un símbolo de los acosados por la élite que no se preocupan por la democracia y la justicia".

Tales declaraciones golpe de hipérbole. Pero el primer ministro de Tailandia en curso, la Eton y educado en Oxford, Abhisit Vejjajiva, es vulnerable a las acusaciones de que él es un testaferro de los intereses creados de la creación de Tailandia. Abhisit no obtuvo su cargo por voto popular, pero se instaló a finales de 2008, después de manifestaciones en contra obligaron a coalición pro-Thaksin de su cargo. No mucho después, se vio obligado a declarar un estado de emergencia para mantener su control del poder. Ahora está firmemente resistido los llamados para nuevos comicios, corriéndose así el riesgo de una escalada de la confrontación hasta ahora pacífica en las calles.

Como siempre, en Tailandia, donde el Ejército ha tomado más de 18 veces desde que el país se convirtió en una monarquía constitucional en 1932, el ejército nunca está lejos. Viendo la última obra de este drama es de 50,000 fuerza de seguridad incluyendo soldados y policías antidisturbios desplegados en Bangkok y provincias circundantes, el Bangkok Post informó. El gobierno también ha invocado la Ley de Seguridad Interna, que permite a los militares a prohibir las reuniones e imponer toques de queda.

Dado el estancamiento en torno a nuevas elecciones, y la decisión de los manifestantes de la oposición del Frente Unido para la Democracia en contra de la dictadura a la simbólica derramaron su sangre en las escaleras de la Casa de Gobierno, no puede ser mucho antes de que el derramamiento de sangre involuntaria comienza de nuevo en serio, como ocurrió por última de abril.

Un ataque con granadas contra una base militar ha incrementado las tensiones. El primer ministro, mientras tanto, permanece escondido en los cuarteles del regimiento de infantería 11 en el distrito de Bangkok Bangkhen, que el ministro de Defensa y jefes del ejército están utilizando como sede de emergencia. Abhisit dice que quiere que la situación se resolvió sin violencia. Pero el jefe de policía Amnuay Nimmano advirtió a los manifestantes a ver lo que dicen, lo que implica que el riesgo de detención por presunta incitación a los disturbios y las declaraciones difamatorias.

La postura de Thaksin como campeón de las libertades de las personas debe ser tomado con una pizca de sal. Su primer mandato es recordado por una campaña polémica de drogas en la que más de 2.000 personas murieron, algunos, se alegó, a manos del gobierno de escuadrones de la muerte de licencia. Su fallido intento de poner fin a la insurgencia de bajo nivel en el sur musulmán de Tailandia también fue ampliamente criticado por la brutalidad. Negocios de su familia siempre fueron controvertidos y están en la raíz de los cargos por corrupción presentados contra él.

Al mismo tiempo, ser gobernados por los gobiernos democráticamente elegidos parece ser importante para el pueblo de Tailandia, al norte y sur, las zonas rurales y urbanas, como lo es para otras naciones. El hecho sigue siendo, inaceptable para los que calumnian la política populista de Thaksin, que él y sus aliados ganan las elecciones cada vez que se organizaron de forma justa y libre. Esta es también una consideración importante para los aliados regionales y occidental de Tailandia. Al lado, Birmania proporciona una saludable advertencia de lo que la subversión del proceso democrático y el régimen militar sin restricciones puede acarrear.

La estabilidad política de Tailandia es importante, también, para la región como un todo, para detener el tráfico internacional de drogas, mantener a raya el fundamentalismo islámico, y para sostener la recuperación económica que ha comenzado a tomar fuerza en el sur de Asia. Cantidades historia reciente de Tailandia a la prueba convincente de la ONU-la sabiduría de las intervenciones militares en la vida democrática. Un respiro de los problemas actuales es sólo temporal. El golpe de Estado-Meisters sólo empeorará las cosas.

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